No deseo mentiras, poesía,
ni utilizar palabras huecas,
oscuras de sentido,
muertas en vida.
No deseo escribirte de aire,
ni de agua sin espíritu,
sin sal que exprima el alma,
que olvide la conciencia,
la liturgia del viento.
No deseo mentiras, poesía,
ni siquiera traiciones
de las que soy culpable.