La noche ha llegado
con ella tu silueta aparece ante mi puerta
y en un segundo tu boca esta ante la mia
tus brazos envolviendome como la niebla
tus labios resbalando por mi cuello
tus manos desnudandome el alma a la par del cuerpo
mis manos frias atrayendote hacia mi
las yemas de mis dedos rozando la extensión de tu piel
mis besos provocando espasmos en todo tu cuerpo
hasta que llegamos a ser uno
uno por unos momentos
en los que la eternidad parece alcanzable
no es sólo tu cuerpo y el mio
esto es más que el contacto de tu piel
es pecar tan divinamente
es entregar tu completo ser
© Derechos Reservados Ana Duran