Viví la experiencia más bonita en sus ojos, en su brillo, en ese tan radiante y sincero, tan puro y tan verdadero. Viví la presencia de todas las maravillas, pues sus ojos me mostraron más de siete, e incluso puedo decir con exactitud que vi al mundo desde un planeta desconocido.
Es que me sentí fuera de órbita, fuera de esta galaxia ella se volvió mi guía, fuera de este mundo conocido me enseño que hasta en el desconocido existe también amor, uno que con los días, a través de sus ojos podría ser visto.
Pude ver más allá del lente humano, pude apreciar e incluso más allá del ojo del mundo, y aunque vi mucho amor, también vi tristeza, rabia, y desolación, vi que nada es tan perfecto como parece, sus lágrimas parecían cascadas, y entre tanta agua inundaba por completa mi alma, dejando como cataratas mis pupilas.
A través de sus ojos observe que los colores son simplemente destellos armónicos, porque aunque vi la contraparte en blanco y negro me hacían pensar diferente, me llenaban de vida, tanto que hasta la sangre solo era una tinta derramada. A través de sus ojos pude sentir que nada es perfecto, pero que hasta lo imperfecto es único.
Henry Ruiz
08 DE MAYO 2022
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