Tic tac dice el reloj,
sus brazos marcan el tiempo,
girando y girando,
siempre avanzando.
Brazos fugaces o brazos pausados,
todo depende de si estoy a tu lado,
pero siempre avanzando,
nunca volviendo y nunca parando.
Miro el reloj con precisión,
mido el tiempo que se perdió.
Cada momento junto a ti
que ahora veo partir.
Las manecillas giran en condición,
siempre las miro con precisión,
pero no cambian su dirección,
me alejan de mi afición.
Cada vez mas lejos,
pero no me he movido,
sigo donde te he perdido,
buscando el revivirlo.
Sigo mirando el reloj,
contando las vueltas,
midiendo el tiempo
desde que te fuiste.
Aquellos brazos siguen avanzando
y yo que te sigo esperando,
implorando que dejen de avanzar
y que vuelvan el tiempo atrás.