Ahora que se ausenta la libertad, a media noche
familias de niños y abuelos abrazan la esperanza
Detrás de las ventanas lloran almas sin suspiros
amanece, no sale el sol de otoño
ni se baña de luz, el horizonte agonizante
exclamaciones, gritos, lagrimas, dolor
Una alucinación fugaz, en las mentes deterioradas
lava la conciencia de aquellos que ven sin observar
sienten sin tocar, oyen sin escuchar
tormenta de arena en el mar.