Iván González Martínez

Preso en tus piernas

Resulta increíble
Cómo lo aparentemente esencial
Se torna ciertamente trivial
Ante tus piernas comestibles. 

 

Si es perpetua la cadena
Y la celda bien inmunda es, 
Que los barrotes sean tus piernas
Y mis almohadas sean tus pies. 

 

El resto qué me importa, 
Qué me importa estar aislado, 
Qué me importa el empedrado
Suelo áspero en área corta. 

 

Qué importa la vida hostil
O que crudos caminen los años, 
Si debo pagar por delinquir
O vivir con un bulto de extraños. 

 

Adentro o afuera, 
Yo solo no me siento preso
Cuando me inmovilizan tus besos
O cuando me enredan tus piernas.