Al verte, las palabras buscan tu mano
por la genialidad que le has demostrado,
el arte por el cual ya va combinado
el signo lirical y tesoro humano.
Pues, eres poeta, también artesano,
tienes la dicha de hallar lo delicado
y en tus versos permanece tan soñado
el deseo que posees gran hermano.
Así como escribes hasta el cielo canta
y se vuelve montaña todo un desierto,
ya que descubres la esencia en toda planta.
De su tumba sale vivo cada muerto
porque saben que tus letras les encanta
y, mejor que dormido es verte despierto.
Samuel Dixon [15/05/2022]