Mi diario olvidado
En un olvidado cajón
hoy encontré mi diario,
lleno de polvo, relegado
tesoro perdido, vivencias.
Con avidez volví a leer
sus páginas amarillentas
unas llenas de alegrías,
otras de helada soledad.
Recuerdo que al escribirlo
unía trozos de nuestra historia,
cual si armara un rompecabezas
hasta que tomaran sentido.
Nunca me apegué al ayer,
mas todavía me golpean
todos aquellos momentos
que con amor un día escribí.
En cada página están tus huellas,
y hasta las partículas de polvo
que de sus hojas vuelan,
están impregnadas de tí.
Ya no estás junto a mí
y siento una lágrima rebelde
que me rueda sin control
porque sigo siendo la misma.
Sólo unas letras..., ¡aún te amo!
maría_dg