𝐏𝐥𝐮𝐫𝐚𝐥𝐞𝐬
Cada instante
en silencio
la juventud acaricia la muerte,
y sin embargo
en Junio gana la pesadumbre
cuando llega el invierno.
Insensible
la materia colectiva del ser,
calienta te de trigo
para olvidar los hisopos de la memoria.
A diario, cuando me acuerdo,
limpio esos hisopos,
se ven serios, firmes,
disimulan
los torpes calambres de sol
que cobijan.
¿Quién puede derrotar a los plurales?
Creo allí
que la caricatura de mi mano
puede darte una caricia.
Anton C. Faya