Déjame mirarte desde abajo
Porque en mis pensamientos
Vuelas como un Ángel
Y tu miel me desespera
Déjame mirarte desde abajo
Que quiero alabarte en silencio
Y acobíjame en tus alas
Mientras yo pido clemencia
Déjame mirarte desde abajo
Y que tu luz refleje mi cuerpo
Celeste, no te escondas
Y muestra tu cuerpo entero.
Déjame mirarte desde abajo
Que no me arrepentiré
Seguiré despierto hasta que te vayas
Y esperaré hasta que te desaparezcas.
Déjame mirarte desde abajo
Que como un niño sumiso admira tu belleza
Luciendo tu impresionante color de plata
Nada se te compara
Déjame mirarte desde abajo
Que no me pesan las horas
Y Como un Lunático perplejo
Espero el rocío sediento
Déjame mirarte desde abajo
Con mis ojos de ternura
Y no me importa si te ofende
Aquí estaré inerte, aquí estaré.