Es posible elegir el silencio
Posible callar para decir que todo muera
Posible extraer todo un cúmulo de sentimientos
Son las miradas de las madres
Son la violencia de su educación
Lo que nos mutila y censura
Una observación que dibuja vigilancias
Pronto calcularemos la voluntad del destino
Y mirándola a los ojos le preguntaremos
Cuál es el motivo de nuestra presencia en tu frente
Cuál es la razón del desequilibrio en tu garganta
No tomaremos esos sentimientos
Porque se resisten a marchitar
Tal vez serán enterrados en la arena
O picados por una mano ahora ausente
Conocemos el futuro por tus ojos
Sabemos que el rocío apelará a tu memoria
Mientras fuerzas que se crean
Intentarán cosechar en nuestras manos
Deja que deposite un beso en tus heridas
Que distribuya los lados oscuros en tu frente
Tal vez así expulsemos al ojo vigilante
A esa sombra que se regodea en tus latidos
Deja que muerda las esquinas de tu alcoba
Que le confiese a tu ángel la oración que inventamos con tu risa
Deja que te cubra con las olas del tiempo
Que los hilos coincidan con tu sombra
Para rescatarnos de este mundo
Para conquistar los terrenos más humanos
Llenos de contradicciones donde da lo mismo
Extrañar y tener