LAS CHICAS DEL LOQUERO
Una vez casi sin saberlo, Marina despertó en un loquero, luego de una gran crisis, que en su momento no entendió y sus padres menos, ella se auto-diagnosticó loca y les comunicó que tenía que ir a un psiquiátrico..
Caminaba sin cesar, no podía comer con su familia, lo hacía en algún restorán de paso y luego se acostaba a tomar el sol, en la costanera o en un parque y seguía caminando.
A los años le dijeron que había hecho una anorexia nerviosa, estos desórdenes, aparecieron cuando a la edad de diecisiete años, yendo al baúl del coche de su padre, encuentra una tarjeta amorosa, de un amante de él. Este secreto guardado por cerca
de un año la devastó. Hizo que la imagen del hombre, se le cayera por completo, aumentando el dolor, cuando también su primer novio, la deja sin más, diciéndole-que no siente más como antes- y le regala una pulsera, y la despide cerca de una heladería. Vivían en el mismo barrio, por eso luego de tomarse el helado le hace su confesión y ella vuelve a su casa sola…
Familia y amigos, le dicen, que quizás su delgadez, había provocado el abandono. Interín, también conoce un hombre casado, quizás más atraído por su delgadez e inexperiencia frente a la vida.
Todo se resumió en un cuadro muy triste, en el cual Marina no sabe cómo salir, se encierra cada vez más, en ese entonces estudiaba francés y hace una identificación con Antígona de Racine, que la impulsa reiteradamente a consumir pastillas, para autoeliminarse.
Tiene varias internaciones en el psiquiátrico, al primero que se interna por su cuenta, me reveló, como los ojos de una internada en la cama de al lado la persiguen, durante tiempo. Ella comía un suculento croissant relleno, y la señora la miraba con más desespero…Ella siente miedo y se arrepintió de no haberla convidado. Todavía a veces sueña con esos ojos de lechuza, de su compañera de sala colectiva de mujeres, perteneciente a la salud pública.
Claro yo le explico y le hago entender que solo tenía diecisiete años y estaba muy asustada. Luego intervino un médico amigo de la familia, para que tenga un mejor tratamiento.
En la clínica privada, recibe electroshock, su sensación fue tan traumática, ya que olvida lo que había aprendido y le bloquea sus recuerdos, permanece como en otro mundo, de nebulosa.Le despierta una tremenda inseguridad. Sin embargo el médico psiquiatra tratante, le dice que se tranquilice, diciéndole que es un principio y luego irá recordando poco a poco.
Conoció a mujeres que estaban todas con un solo motivo, en el psiquiátrico, el abandono de su pareja . Unicamente habían dos mujeres, que compartían la habitación, prácticamente durante toda su vida, recibían atención especial peluquería manicuría, etc.
Estas dos se llevaban muy mal, se insultaban casi todo el día, una de ellas llevaba un cigarro casi permanentemente en los labios de costado, a veces prendido y otras apagado mientras que cojeaba de una pierna…La otra era muy pequeña , me dice, Marina que casi todo el tiempo estaba en bata, pero muy bien peinada.
La familia de esta mujer pequeña de estatura, la mantiene en el psiquiátrico, ya que muchas veces a pesar de la medicación, se resiste a las cosas elementales, como bañarse. Insultaba a las enfermeras-
Marina evitaba mirarla, ya que por esto ya la insultaba, estaba casi siempre enojada.
Además de estos dos personajes, que conoce, en sus tres internaciones, había otra que vivía en la parte más pobre, en otro sector, pero tenía permiso de salida. Así que servía de nexo para las internadas con el exterior. Compraba cigarros y cuando tenían reunión en la habitación de alguna de las internadas, la mandaban a comprar pastas, para compartirlas con un té.
En sus conversaciones, Marina, aprende de todas ellas, algo. A pesar de ser ella la menor de todas, ahí estaban porque un hombre las había dejado. Habían intentado matarse, una que había sido madre y con un bebé de seis meses, el marido la deja por otra…
Es entonces, que Marina se promete a sí misma, no estar allí más, porque ningún hombre se lo merecía…
Otra vez cansada de que la medicación, que le daban la hiciera dormir mucho y su médico no la despertaba, cuando la venía a ver.
Furiosa por este abandono, quería decirle que ya se sentía bien y quería salir. Como protestaba, en vano ,planea su huída, Había un muro, relativamente bajo, para ella, que era bastante atleta, con un puñado de cosas que tenía, porque, nada era muy necesario estando allí adentro.
Trepa el muro, muy temprano en la mañana y se toma un taxímetro
Llega a su casa, sus padres dormían, toca timbre se introduce en
la cama de ellos en medio de los dos, feliz de estar en casa nuevamente. Ellos, avisan telefónicamente, al nosocomio, de que ella está ahí y que se encuentra en perfecto estado.