Mauro Enrique Lopez Z.

Presentimiento

Tenía ese presentimiento, y el sueño 

que me acosaba en mi mente; hasta 

en mi pobre alma, que locura la mía, 

que la seguía esperando. Hoy se cumplió,

que la ví; no es la misma mujer 

que anhelaba, mejor para mí, porque 

iba a caer en pena; la vida que lleva, 

causa lástima, y mis sueños 

son ahora de dicha y gozo, aunque 

estoy solo y gracias a Dios con su 

bendición, con el pan a diario.