Sé que no lo reflejo, pero estoy intentando salir adelante.
Intento dejar de sufrir mi pasión cuando me miro al espejo,
Y no flagelarme con el látigo de mis pensamientos.
Intento reconstruirme desde cero.
Cambiar por mares mis desiertos,
Guardando granos de arena, uno a uno en botellas vacías,
Vacías de licor con el que intente llenarme.
Naufragio en el océano de mi ansiedad,
Me ahogó en el remolino de mi locura,
Nado con latas de sardina sin mayonesa,
Y solo tengo como salvavidas, personas desinfladas.
Intento adelantar el invierno,
Para emigrar a un lugar de aguas tranquilas,
Dónde la pesca de atún salga con todo y verduras,
Y en vez de tormentas de inseguridad, encuentre un arrecife de calma.
Estoy intentando amarme, aunque haya olvidado cómo hacerlo.
Sentado a solas en la banqueta, repitiendo en mi mente que puedo,
Escribiendo poesías a la muerte, sabiendo que quiero seguir viviendo.
Aspiro a saber amar, aunque me siga quedando en el quiero.
A veces me quiero morir, y a veces no quiero callar.
A veces quisiera salir, y a veces me quiero quedar.
A veces me quiero rendir, y a veces lo quiero intentar.
A veces me intentó amar, pero no me terminó de odiar.
Estoy intentando amarme, y no dejaré de intentarlo.
Me amare tanto, que me llenare de paisajes hermosos.
Me sanaré por tantos deseos arrojados al pozo.
Estoy intentando amarme, y seguiré intentando más tarde.
¿Me amaré?
No lo sé,
pero mañana... También intentaré.