Hay días que me ahogó, sabes. O sea, no es precisamente que me ahogue, solo es la sensación de que me ahogo. (he dicho ahogo muchas veces). Pero lo siento, aunque se que mañana quizá sea un día más soportable. Porque llevo la cuenta desde hace no se cuanto. Y se que hay días buenos y días malos. Hoy estoy en el intermedio y hoy siento que el aire y las horas no pasan. Se que pasarán a su debido tiempo. Pero yo tengo la sensación que necesitan pasar más rápido. Hay gente, pero no compañía. Y hay tantas cosas por hacer, y se hacen, pero cuando se termina, sea derrota o triunfo, se acabó la alegría o la tristeza. El amor ya no me seduce. Pienso mucho en algo, es un secreto que no puedo decirlo a todos ni con todos puedo callarlo. Estoy metida hasta el cuello en un gran problema. Pero el problema, realmente el problema no es el problema. El problema real es que no quiero salir de él, si salgo. Me quitan lo único que hace que se me quite esta sensación de ahogarme. (he dicho mucho esa palabra).