Mi niña vamos a llegar tarde, estás buscando qué vestir, te maquillas y peinas tu pelo, me pides que te suba el vestido, te volteas, me muestras tu espalda y lentamente subo el sierre rozando tu piel suave, al ponerte los tacones levantas la pierna descubriendo parte de ella y enloquezco, te perfumas pero nada se compara al olor de tu piel, por fin estas lista y me preguntas si te ves bien y te digo estas maravillosa hoy.
Llegando a la fiesta un golpe de celos me pega en el corazón porque todos giran a ver a la hermosa mujer que me acompaña, a la gran mujer que camina a mi lado, con sus ojos qué brillan entre la gente y una sonrisa que conquista cualquier mirada, te das cuenta perfectamente mi ataque de celos y me preguntas si me siento bien y te digo me siento maravilloso hoy, me siento muy bien porque a pesar de que cautivas todas las miradas aun así veo el amor en tus ojos, se que tu corazón me pertenece, tu vida la quieres vivir a mi lado y en tu alma solo estoy yo logrando qué mis celos desaparezcan y lo mejor es que a pesar de todos mis celos no te llegas a dar cuenta cuánto te amo.
Termina la fiesta después de bailar juntos por horas, es hora de volver a casa, me da un ligero dolor de cabeza y decides manejar, me llevas a la cama, me cuidas, me abrazas, con un beso me dices hasta mañana y mientras apago la luz te digo, mi niña estas maravillosa hoy.
Esta pequeña historia llena de ternura es como quisiera vivir cada día de mi vida a tu lado, acompañandote en cada momento, ser feliz qué a mi lado se encuentra la mujer más maravillosa e increíble qué existe, amanecer cada día abrazado a tu cintura, abrir las cortinas, que la luz del sol ilumine tu cuerpo desnudo y perderme en cada poro de tu piel, que con una sonrisa llena de vida me digas buenos días, te levantes de la cama y te conteste, mi niña estas maravillosa hoy.