jessica_21

Yo no soy tuya

Yo no soy tuya, mi amor…

 Entiéndelo.

 

Estoy contigo solo un momento, y ese momento es lo que yo ahora más quiero.

 

Tú no eres mío, mi amor…

Eso lo entiendo. 

Estás conmigo por un momento, y ese momento es lo único que tenemos.

 

Y si algún día el fuego se apaga

Y si algún día la magia termina

Y si algún día estando conmigo pensaras en ella…

Entonces me iría, te dejaría, pues tú no eres mío, eres del viento… y el viento a veces sopla hacia lo adverso!

 

Por eso mismo te digo que lo único realmente nuestro es este preciso momento, la felicidad que siento de tenerte a mi lado y sentirte en mis brazos, la sensación absurda de que el tiempo se detiene mientras te tomo de la mano, el amor que te tuve, el amor que te tengo y el que te tendré siempre, ya sea que cerca o lejos te encuentres, el amor que se que tú también me tienes…. 

Eso es todo lo que nos pertenece…

 

Este mágico momento en que todo desaparece…

Este efímero segundo en que creemos que nos amaremos siempre, sin necesidad de promesas ni de testigos, sin necesidad de anillos ni compromisos, sin necesidad de unirnos bajo la ley divina ni bajo la ley de los hombres, porque la ley que domina tu unión y la mía es simplemente la del amor que se impone, ¿y que ley hay más fuerte que aquella? 

Pero eso es todo lo que tenemos, mi amor. Un fugaz y efímero momento, producto de la casualidad de dos cuerpos que se encuentran en un mismo lugar, y que de la misma manera pueden volar, y buscar en nuevos sitios su felicidad.

 

Por eso es que yo no soy tuya, mi amor! Ni ahora, ni nunca. 

Lo único que es tuyo es este momento, y mañana… ¿Qué te puedo decir de mañana?

 

Mañana será tuyo el recuerdo. 

Por favor entiéndelo, porque al igual que tú, yo no soy de nadie, soy solo del viento, que es quien me lleva a donde yo quiero y es con quien yo vuelo hacia lo eterno.

 

Soy solamente suya, mi amor, le pertenezco!  Estoy contigo solo un momento, que es mientras dure esto que hoy siento! 

Y si esto se acaba…

Y si esto termina…

Te seguiré amando, de un modo distinto.

 

Y a donde vaya, te llevaré conmigo…

Pero por tu bien y el mío seguiré mi camino. 

Pues tú no eres mío, eres del viento, y como te he dicho, el viento a veces sopla hacia lo adverso. No podemos intentar retener lo que nunca ha sido nuestro.