Nacho Rey

NADA PROFETA (A Khalil Gibrán)

 

Porque no es querer ser El loco

ni ser señor charlatán. Alas rotas

como ese amor imposible mis derrotas

atacan los secretos de mi corazón. Poco

 

importa ya. Lágrimas y sonrisas 

toda esta vida mía  y en amor nada profeta

ni llamándose Marta mi Ninfa secreta,

nada volverá excepto las negras misas.

 

Entre noche y día he de vestir mi alma.

Estar solo a la cacería del pensamiento

y las meditaciones con ese suave nacimiento

de mi interior suculento, me lleve a la calma.

 

Esos gigantes de la noche la trova herida

como animal silencioso solo ya camino

al hablar mi alma sabe seguro mi destino

tan sencillo, la muerte del poeta es su vida.

 

 

                 (Mayo-2.022)