Tengo nebulosas en la memoria, pero yo se que te había visto antes, quizá en otra vida, quizá en un mundo paralelo donde amar no está prohibido y la distancia es cercanía.
Pienso en ti y no veo tu rostro, se dibuja en mi camino una montaña donde la lejanía hace eco incrustando su reflejo en el espacio que dejaste cuando me arrancaste el corazón.