Alfredo Saez

-La verdad maltrecha-

 

La Verdad caminaba segura y muy calma por delante,

fresco cortejo solar el suyo en serenos aires puros

gracias matinales, nuevas horas del deleite campante,

horizontes confiables sin pétreas murallas ni muros .

 

La veracidad purificaba gozosos los sentidos,

 la armonía musical vibraba entre dulces pibes mansos,

sinfonía pedestre y centrífuga  de cantos amigos

plácida estampa cordial del caudal de azulinos remansos .

 

De pronto la Ira  enrojece. Satán eyecta su cola:

 hiriente punzada pérfida ruge a colérica vez,

el agobio de Ambición y, del Poder ¡ cínica doblez!

 

Protestaron  sombríos  los hieráticos hombres  de toga

emiten desde anaqueles preceptos ¡el nuevo derecho!

El beatífico paisaje veraz quedó muy maltrecho.