Busco en ti
la mañana,
después del ocaso
y la noche.
Busco en ti la luz
del día y la calma,
busco la mitad
entera del alma.
Agua y pan
para mi sed y hambre,
Un camino que me lleve,
me arrastre y me traiga,
donde el tiempo enmudece
y sin sordina canta.
Busco en ti calor,
humedad y esperanza.