Caen levemente, son dueños
absolutos de impulsos tan fieles;
su lirismo transforma ese error en certezas:
confunden el juego.
A suertes se echan si ilesos no cuenta
(vi alguno mecerse en suspenso)...
¿Acaso falta un pedazo de esencia?
¡Ya sería a él lanzarse como un torbellino
-repuesto-!
No estamos solos ni acompañados
en nuestro ángulo secreto, muerto acaso.
Yo estoy contigo aunque no me ves,
en cualquier momento sigo ahí a tu lado
para hacerte los honores encantado.
No estoy vivo pero me muevo
bastante bien por el terreno de mis penas:
soy el fuego que las planta
para que puedan avanzar mis pies
pisándolas fácilmente;
y eso luego eso es lo que tiene...
Que te crees lo que eres al expresarte,
pero quién con más frecuencia
es que te abduce sobre una página
manchada de pús y las púas que te quitaste
allí a la luz ahora son ceniza
para un nuevo túnel dar pasado asá tus lunes a...