No anhelarás con impaciencia
el instante de escucharla cerca…
No recorrerás los sinuosos recovecos
que ocultan sus enigmáticos deseos…
No sentirás el fuego abrasador
de rozar su piel con tus dedos…
No navegarás en los mares del placer
que puede regalarte su querer…
No encontrarás pasión tan inusitada
capaz de vender su alma…
Nunca conocerás mujer más enamorada,
enamorada de una estrella,
aunque ella sea una simple humana...©