Maribel del Ser

PROHIBIR

Que pretensión tan necia

pretender prohibir,

adjudicarse ese poder

creerse el  mejor.

 

En que basara su locura

de aprehender la verdad,

e imponerla sin amor,

de donde nacerá tal acción.

 

Mas raro aun,

me parece la recepción,

de tal adjudicación.

 

Reconozco la pereza,

psicológica de la cuestión, 

y el precio excesivo 

pagado en tal situación. 

 

Permanecer dormido

como zombi,

deambular mecanizado,

responder programado,

es la triste finalidad

de la humanidad.

 

Visitar otras realidades

me demostrara mi necedad,

filosofar me despertará

en rebeldía, gratis, descarriada, caótica, 

entraré.

 

Un fuego interior me recorrerá,

y una nueva construcción nacerá.