No busques ser escuchado,
Aprende a escuchar.
Así sepultarás mil prejuicios
Y acertarás en el consejo.
Escucha a todos, sin más ni menos,
Pues, todos tienen algo que contarte.
Escucha al sencillo y humilde,
Y te darás cuenta de tu soberbia.
Escucha al tonto, loco y chiflado,
Ellos también tienen una vida que narrarte.
Escucha al alcohólico y drogadicto,
Ellos también tienen verdades que revelarte.
Escucha a los niños: son semillas del futuro,
que sólo saben decir la verdad,
y te darás cuenta de tus mentiras.
Escucha a los jóvenes,
son personas que aspiran a los grande…
Escucha a los ancianos,
son bibliotecas que hay que frecuentar.
Escucha al humilde y callado,
y verás la sorpresa que te llevarás,
porque es vasija de sabiduría.
Escucha a todos para ganarlos a todos.
Sé humilde y reconoce tu verdad:
Aprende lo que no sabes de los que sí lo saben.
Sé generoso y no te encierres en tu “yo”:
Da de lo que tienes a los que no lo tienen.
Aprende a compartir:
Amplía lo que sabes con los que también lo saben.
Sé sincero contigo mismo:
Pregunta lo que no sabes,
por amor a los que tampoco saben.
Sé todo para todos, pero no dejes de ser tu mismo.
Nunca te imagines más que los demás,
nunca pienses que eres más que los demás,
no desees ser más que los demás,
no digas que eres más que los demás,
simplemente sé tu mismo.
Nunca camines delante de alguien,
pues le taparías el camino.
No camines detrás de alguien,
pues lo abandonarías a sus propias manos.
Camina a su lado, como hermano, amigo y compañero.
Perdona y pide perdón.
Perdona y enseña a perdonar.
Ilumina y deja que los otros iluminen.
Construye y deja construir.
Busca siempre la verdad, no tu verdad.
Compréndete y comprenderás.
Conócete y conocerás.