Una cabina oscura,
encerrando en la nada,
mis pensamientos están acorralados
y sin predecirlo
emanaste de los recuerdos,
te materializaste en la vida
y recibí un “hola” como regalo.
Mi mente esta desecha,
sin compromiso,
sintiendo un vacío.
¡Inseguro!
¿¡No puedes hacer nada bien!?
Mis manos tiemblan
y no encuentro las palabras adecuadas,
me ahogo en mi vaso de agonía
lo encuentro inútil,
¿Podre algún día encontrarla?
Perdón, a todos.
Lo intentare, mejorare,
levantare mi cabeza
y mirando tus ojitos ajenos
me disolveré y me dejare llevar por el río
hasta donde se encuentre tu alma
esperando algún día
abrazarte por primera vez.