Las rosas están secas,
alguien que decía amarlas
Las condenó a la sequía.
Le cortó los pies que firmes
En la tierra se agarraban,
arrancando pétalo por pétalo
¡El despavorido deseo de poseer!
Enceguece u tergiversa.
Donde antes habitaba la belleza
La inocencia de un color cálido
Ahora sólo queda el vacío
Un espacio seco que me recuerda
Lo que supuestamente era el amor.
Al menos para él...