En el fondo de la nada…
me encontré con su abandono,
y me hice amigo de su ausencia.
Me agrado su compañía…aunque fría.
Su silencio fue elocuente,
y entendí su indiferencia.
Se sentía algo distante,
y no quise incomodarla,
preferí contemplarla en su nostalgia,
y extasiarme de su lúgubre belleza.
Experiencia poco usual…
compartir su trivial melancolía.
Ella y yo en la misma desazón.
La invite a caminar este espejismo,
alucinando despertar algún momento,
y le abrí mi corazón…
sin ninguna precaución,
y fue un error…no medir las consecuencias.
La pasión se enredó ilusionada,
y confundió a la razón…
y fue un error…tomar la decisión de conquistarla.
Me enamore tal vez de su apatía,
me deje capturar de su vacío,
y su amargura se hizo mía.
Termine atrapado en su dolor,
y al final…fue un error,
no debí dejarme seducir de su hermosura…
porque hay veces que el amor…
termina siendo una tortura.