La tempestad, con sus relámpagos, estruja mis noches sin luna
viendo pasar su triste ayer, se va mi primavera entre los tiempos;
pasó el hoy, entre pinos, y aroma de rosas, en el arre sutil del poema
Enamorado colibrí, en busca del aroma de la miel entre las rosas,
escucha, en el eco, el coro desafinado, sin música, de los jilgueros
Al alba, entre las hojas húmedas de brisa, brota del alma este poema,
mientras se apaga la llama del imperio nocturno de la luciérnaga,
dejamdo inacabado, su triste poema, quedó olvidao entre los cedros