Maribel del Ser

AVENTURA PASAJERA

 

Te vi y nada paso

te presentaste luego

con tu gran camión

y la aventura empezó.

 

Te vi alejarte,

te negaste queriendo aferrarte, 

con lo puesto te marchaste,

nada pude hacer

solo agradecer tu honradez.

 

Tenía un camino que trazar

y lo retome sin dejadez.

 

Mucho me quedaba por cumplir

dado el tiempo que perdí,

aunque no fuiste la causa

sufriste por mi decisión

repentina y sin compasión.

 

Las metas que me tracé

pudieron mas que las promesas

que me ofreciste,

nunca me arrepentí

y un recuerdo amable te consentí.

 

Fue sorpresa ese día

en que te vi reaparecer, 

tal vez fue al amanecer...,

con tu robusta figura me emocioné.

 

Grite tu nombre con placer

y volvimos a esos atardeceres, 

unos días recobré

la nostalgia del ayer.

 

Pronto se difuminó 

este sentimiento precoz, 

 cuando te alejaste esta vez

con más cordura y madurez.