Poemas Peregrinos Pantaleón.

Otro Día Cualquiera

Otro Día Cualquiera

 

La tristeza del hombre caminante, del día y testigo de la noche

La ciudad está fresca, moviendo las hojas del parque

Rechinan los pasos en el clamor, de las hojas secas

En este día el banco espera tu visita, junto al árbol del mal escritor

 

Globos de celebración y una fogata que arde entre el bullicio

La ciudad está llena de rostros, que deambulan por la tarde de tantas tardes

Tendido sobre el césped, celebro un día universal, donde solo yo lo vivo

Hay rosas marchitas de junio, que alegran la tarde, antes que se escape el día

 

Hay pesares en esta tarde alegre, de mariposas besando el néctar de las rosas

Bebo agua de manantial, pensando en los días crucificados que me quedan

Tarde mía, furiosa y doliente, como la última ola del crepúsculo

Mi corazón está contigo, rodeado de personas que no conozco

 

Mis pies de caminante que tocan con fuerza, esta tierra fecunda

Mientras un hombre joven, sujeta la piola de una cometa, buscando libertad

Diviso un niño correr tras la pelota de goma, al final del parque

Las manos acarician sus canas, como velos tocando el cielo azul

 

Dolientes memorias, ahora está solo, como un viejo banco en el atardecer

Los finches todavía trinan, en esta hora del día, con esperanza y alegría

Soledad que alegra mi alma, hambrienta de amor y recuerdos

Quizás el próximo año mis manos estén labrando la tierra fértil

 

El viento iracundo pasa golpeando la cara, sin compañía

Los arboles se mecen fuerte, empujando las hojas a beber de la fuente

Mi corazón es de este mundo, sin preñar mariposas en noche de estrellas

Mi corazón de hombre caminante, chupador de dulces mamas

 

En este atardecer solo, trepan por las ventanas recuerdos

La palabra pena deambula por mi mente, no quiero que me pertenezca

Escondo mis pensamientos, en los altos campanarios de esta ciudad

Caen las horas y se acaba el día, celebrando a mi manera en esta tarde

 

Mis palabras se debilitan en esta tarde gris y yo seguiré siendo un hombre creador

En el fondo de tierra, habrá una tempestad, que guie mi destino

Esta ciudad perfuma mi corazón, donde un niño se despierta a media noche

Nunca fue mi discípulo, yo solo me quede, mirrado el cielo profundamente

 

Brooklyn New York Junio 19, 2022-06-20

Pantaleón

Derechos Reservados Del Autor

Any other day

 

The sadness of the walking man, of the day and witness of the night

The city is cool, moving the leaves of the park

The steps squeak in the clamor, of the dry leaves

On this day the bank awaits your visit, next to the tree of the bad writer

 

Celebratory balloons and a campfire burning amidst the hubbub

The city is full of faces that wander in the afternoon of so many afternoons

Lying on the grass, I celebrate a universal day, where only I live it

There are withered June roses that brighten the afternoon before the day slips away

 

There are sorrows on this happy afternoon, of butterflies kissing the nectar of roses

I drink spring water, thinking of the crucified days I have left

My afternoon, furious and suffering, like the last wave of twilight

My heart goes out to you, surrounded by people I don\'t know

 

My walker\'s feet that strongly touch this fertile land

While a young man holds the string of a kite, looking for freedom

I spot a boy running after the rubber ball, at the end of the park

The hands caress his gray hair, like veils touching the blue sky

 

Painful memories, now it\'s lonely, like an old bench in the sunset

The finches still chirp, at this time of day, with hope and joy

Loneliness that makes my soul happy, hungry for love and memories

Maybe next year my hands will be tilling the fertile land

 

The angry wind blows past the face, unaccompanied

The trees sway strongly, pushing the leaves to drink from the fountain

My heart belongs to this world, without impregnating butterflies in the night of stars

My heart of a walking man, sucker of sweet mamas

 

In this lonely sunset, memories climb through the windows

The word shame runs through my mind, I don\'t want it to belong to me

I hide my thoughts, in the tall steeples of this city

The hours fall and the day ends, celebrating in my own way this afternoon

 

My words weaken on this gray afternoon and I will continue to be a creative man

At the bottom of the earth, there will be a storm that guides my destiny

This city perfumes my heart, where a child wakes up in the middle of the night

He was never my disciple I just stayed, looking deeply at the sky

 

Brooklyn New York June 19, 2022-06-20

Pantaleon

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