Báñame de tu río.
¡Oh hermoso río! que de sus fluidos
sumerge como bandido queriéndome querer
y esta sed la sumerges en tu vergel,
viras la espalda
será que no lo quieres sentir,
desenfrenadamente
eres en mi costado
ese divino ser
que ha llegado con su corriente,
mi boca te toca, bebe de ti,
contigo quiero correr.
Dejas que siga, quiero en tus aguas
cristalinas navegar,
estoy soñando este fuego de amor.
Miro el despeje de las nubes
que se mueven, me suben
en su lento andar, quiero como ellas
a ti poder llegar.
Mientras mi cuerpo sucumbe
entre tus húmedas sábanas
y beso tu pedestal fresco,
prendida de tu amanecer.
Quiero continuar
besando tu espalda,
seré el ángel de tu guarda
que de este sueño
no quiero jamás despertar.
Será qué soy una glotona
y mi avaricia desentona,
el sentido del verbo amar.
NellyCastell