Todas las postergaciones
Todas las llamadas desesperadas
Estas asumiendo su asfixia
Son señales de una vida que se consume
Entre distracciones luminosas
Entre placeres mal callados
En rituales torpemente practicados
Las tumbas están retorcidas
Somos el resultado
Y un mal ejemplo de ese resultado
No vivimos solo para ser perseverantes
Tal vez vivimos para elegir
Para ver cómo no sirven los intentos
Para ver cómo el mendigo muerde su arena
Y olvidamos y olvidamos
Las prioridades no evocan felicidad
Los mensajes sublimes son subliminales
Suspiramos por lo que no podemos hacer
Y lo que hacemos es devuelto
Pronto llegará el momento de invocar a los dioses
De admitir que nuestras estrellas parpadean
Ese día estaremos bajo las olas del arrepentimiento
A punto de lamer el suelo