El viento me susurra que me quieres
¿y debo conservar este secreto?
el órgano al latir tan indiscreto
me compulsa a cumplir con mis deberes.
Transportada al ayer de mis placeres
y al momento fugaz de extraño dueto,
dos lágrimas rodaron sin el veto
con dolor de perder dulces quereres.
Me niego a continuar siendo la sombra,
el fantasma que da la luz divina
e inmutable quedar si alguien te nombra
Ser siempre de la rosa cruenta espina...
Nací para brillar en roja alfombra
y entre las joyas ser la más genuina.
Como agua cristalina,
transparente entre rocas ¡quiero andar!
mariposa entre flores, y volar.