Si de hablar se trata, hombre, no discuto contigo
que silenciaste mi voz y adoptaste el silencio
para no hablar conmigo.
Si de abrazar se trata, hombre, no discuto contigo
que cerraste tus brazos y dejaste los míos
abrazando el vacío.
Si de besar se trata, hombre, no discuto contigo
que tiraste mis besos y ocultaste tu boca
para darme un castigo.
Si de amar se trata, hombre, no discuto contigo
que alejaste el amor y me dejaste en manos
de un futuro sombrío.
Si de pensar se trata, hombre, no discuto contigo
que tienes mente estrecha y un cerebro perdido
que ni siquiera sabe qué cosa el destino.
Si de olvidar se trata, hombre, no discuto contigo
que te fuiste fríamente y veloz me olvidaste
porque ya me olvidé de ti y de tu olvido.
Amelia Suárez Oquendo