Déjame abrazar el alba,
sin sombras, sin llamas,
sin nada que robe luz,
a sendas puras del alma.
Deja, déjame abrazarte,
si tu y yo, somos iguales,
tú, ni yo tenemos males,
fuerza, o poder que aparte.
Ven..! Toma ahora mi mano,
intentemos paz a los días,
hay en tí suficiente sabiduría,
para ser yo tu hermano.
Poeta al atardecer.
Julio de 2022.