Federico Mendo Sánchez

PENAS

Hay  penas que las llevo en el alma,

metidas muy dentro por no renunciar

a ese amor tuyo que no vive en calma

que tarde o temprano me dejara de amar.

 

Son penas con sangre escritas,

aquellas que emanan de mi corazón,

son muchas que junto a mis cuitas,

irán esta noche a buscar el perdón.

 

Son penas de hambre, de dolor,

son llantos de un niño, buscando el camino,

la mano piadosa que le dé amor

y la lleve consigo por un buen destino

 

Hay penas, penitas, penas,

ya esta acabando con mi pobre vida

la paz no consigo, no hallo alegría

no encuentro la luz mi fe esta perdida.

 

Las penas aumentan cuando mas te quiero

cuando en mis días paso con la soledad

por favor no quieras que de amor yo muera

o que viva sumido a la cruel orfandad.

 

Pero estas penas se acuestan conmigo,

por mas que las duermo conmigo están

tú, corazón mío, tú eres testigo

de lo feliz que me siento cuando ellas se van.

 

Quisiera a mis penas enrejarlas a todas,

poner a mi lira como mi defensor,

pero son muchas que no puedo juntarlas

culpable eres tú, culpable tu amor,

 

Las penas que tengo laceraron mi alma,

no las guardo rencor, ni olvidarlas quisiera,

ni te culpo corazón porque tú las amas

sin pensar siquiera que por ellas muero.

 

Penas que acabando están todas mis energías,

la tristeza me opaca día tras día,

en mi rostro no se dibuja ya la alegría

porque no está el amor que yo quería.

 

Y cuando podré dejarlas dormidas,

para poder pasar mis noches tranquilas,

las penas de amor son mis preferidas,

pero a todas las llevo acuestas mis penas.