Presentí cada día tu mirada y admito que esto es una total locura, pero es mi locura, te empecé a querer poco a poco escuchándote cada noche y jugando a escribirte poemas te termine amando y ahora resulta que no puedo dejar de pensar en ti y todavía no te conozco.
Todavía no te conozco y ya me he inventado un millón de historias contigo, he soñado con el sabor de tus besos, te mando mis besos con el viento, esperando que el viento te bese para que te descuenta que me enamore de ti y te des cuenta que yo te amo sin conocerte.
Escribo mis poemas y canciones, a una hermosa estrella que brilla en el cielo, pero que no conozco, pero le escribo con mucha pasión como si la conociera de toda la vida, mi guitarra toca las mas dulces notas musicales, con la esperanza de un día cantarle una canción a mi gran amor.
Dios me puso en esa noche perfecta de otoño cuando escuche por primera vez tu dulce voz, no se si Dios me estaba jugando una broma o en verdad quería que me enamorara de ti, lo único que se es que le doy las gracias por dejarme conocerte en aquella noche mágica.
Te empecé a escribir sin conocerte, empecé a ilusionarme de ti, le empecé a contar a las estrellas de aquella hermosa chica de linda voz, empecé a soñarte y a darle sentido a mis sueños, empecé a pensar en la mejor estrategia para conocerte, simplemente te empecé a amarte sin conocerte.