Voy de vuelta directa al mar
donde habita tu presencia
desde que te quedaste
durante la partida real.
En tu búsqueda perseguida soy
dentro de un oleaje portentoso,
queriéndome agarrar para enfrentárseme
y no dejarme verte y sentirte.
¡No, torrente de mar!
¡No opacarás su hermosura!
Ella me suaviza la piel
y ensancha mi amor…
dándome esperanza de como proveer a los demás
esa relación que me enseñó.
¡Gracias Dios, por esa madre!
Experiencia gloriosa que me das.
Mariposa de Mayo
7/14/2022