No te extraño,
lo que tú me das no es difícil para mí
encontrarlo en otro amor...
No te extraño,
te lo digo mirando tus ojos,
tu exquisita mirada que tanto detesto
por nunca poderla descifrar.
No te extraño,
te lo sigo diciendo mirando tus labios
cuando a esta hora del dia
me encantaba besarlos.
No te extraño,
te lo digo firme
mientras tu piel brillante
me deslumbra
¿De qué sirve amor,
que tus encantos me confundan
si la rigidez de tus gestos me inunda?
No te extraño,
aunque me interrogues una eternidad.