Deja que tu vida se libere
de la dura angustia que la atrapa,
del dolor que sufre y la traslapa,
que cual filo de navaja, hiere.
Mira que tu vida no tolere
la dura pena que la agazapa;
y los temores que en cada etapa,
tu corazón y mente, sintiere.
Vuela libre como el pajarillo
que va de rama en rama, ¡cantando…!
Libertad, su canto proclamando,
derrotando la voz del caudillo
que constante, vive golpeando,
con la fuerza de un duro martillo.