Hermes Antonio Varillas Labrador

El desespero por el dinero.

 

El desespero por el dinero.

 

Se equivoca Ernest Hemingway

Dios no se olvidó del dinero,

le dio al hombre libre albedrío

y en su abusivo y torpe empleo

y errada decisión, se olvidó de él,

ejemplos hay a la orden del día   

el más prístino y emblemático

su desmesura en “La torre de Babel”.

 

Hermes Varillas Labrador

#FormandoCiudadanía & #ElArcoIrisDeLosNiños

 Inspirado en la frase: “He nacido para disfrutar la vida, pero Dios se olvidó del dinero” —  Ernest Hemingway, libro París era una fiesta