( Epigrama )
Lapsus que dura toda la vida,
es un abismo en el tiempo.
Como un reloj roto,
sus agujas no avanzan ni retroceden.
Estamos atrapados en su espiral,
girando en círculos de silencio y ausencia.
Es un eco sin respuesta, una habitación vacía
donde las palabras se evaporan antes de ser pronunciadas.
La soledad no es solo la falta de compañía;
es la sensación de estar perdido en un laberinto sin salidas.
En su abrazo, los relojes se detienen, los calendarios
se desgarran.