Cada día me acerco más
A la cordura que un día extravié.
Cada día me alejo más
De los recuerdos que un día
minaron mi Fe.
Y encuentro en cada día la necesidad
De encontrarme a mi mismo...
Al borde de aquel amor ingrato
Que me sumió en un abismo...
Lucho entonces cada momento
Por mantener la cordura y la paz,
Inmersa en un sinmar de recuerdos
Que hacen daño, que hieren
Que lastiman, a pesar del tiempo.
Y así, sin más,
respiro y vivo cada día
Alejando aquello que un día,
me hizo daño.
Porque eras la persona
en la que más confiaba...
Porque fuiste la persona
en la que deposité...
Toda mi fe,
nuestros planes,
nuestros sueños...
Y todo eso...
Tu lo olvidaste...