En un atardecer te busque, porque
siempre caminabas en la playa, que
te gustaba ver caer en sol.
Que tristeza la mía, solo sé, que llegó la noche
y tú hasta el día de hoy, puedo ver
tus encantos de mujer, y aún así
escribo lo bonito de un atardecer,
entre velero pescando cuando
yo en esos días de juventud.