Los árboles tambaleantes
Se adaptan en ritmo danzante
Al empuje gresco y vil
Que el viento con fuerza sopla.
Humeante el café en mi taza
Empañando los vidrios del clima
Allí afuera es punto y aparte
dentro de mí, es menguante la rima.
Trozos de troncos vivos
Dejará el soplo de la parda noche,
Sorbos húmedos en mi lengua
Con sabor a manos vacías.
Quiero echarle la culpa
Al café... Al clima...
sin embargo...
La vil soy yo... Por lloverle la vida.