kin mejia ospina

ELLA FUE.

ELLA FUE.
Ella fue en mí vivir como un pecado,
no es mi culpa el haberla deseado.
Culpable fue el azar de hacerla bella,
o fue del cielo que arrojó una estrella.

La vi pasar con caminar de hastío,
su corazón latió al compás del mío.
Y sucedió lo mismo cada día,
que al pasar me miraba y sonreía.

Y fue un instante, la abordé ligero,
tenía que decirle que la quiero.
Me dijo susurrando, soy casada
y el deseo fluía en su mirada.

Una noche de luna y fantasía,
en un lecho de rosas la hice mía.
Lo que los dos sentimos de repente,
sucedió con la furia de un torrente.

En sus ojos de fuego me quemé,
y no puedo saber por qué la amé.
Si ella significó toda mi vida,
necesito saber como se olvida.

Ante el recuerdo de su amor lejano,
el sueño se me escapa de la mano.
Ella fue una ventana a la quimera,
y no podré olvidarla  aunque quisiera.

Hoy queda un nombre de mujer ausente,
y un rostro que se pierde entre la gente.
Otros brazos le dan pasión y abrigo,
pero aunque este con otro está conmigo.

Que importa que hoy me llene de su olvido,
sí queda en la memoria lo vivido.
Ya su silencio tiene voz de ausencia,
y yo sigo esperando su presencia.

KIN MEJIA OSPINA.