Deseo soñar contigo
en la más hermosa noche
en donde irradie la luna
ataviada de fulgores
y que las estrellas brillen
pululando como soles
reflejados en tus ojos
con destellos que enamoren.
Anhelo que en la llanura
que se extiende hasta tu porche
montemos dos alazanes
trotando hacia el horizonte,
que me lleves a tu playa
y vivamos ese goce
de entregarnos por entero
alma y cuerpo, mente y nombre.
Que este vínculo admirable
se acompañe con acordes
de una música celeste
de insondables emociones,
que en la vid de mis entrañas
crezca el fruto de tus brotes,
maravilla de la vida
y esperanza de mi prole.
La familia es tan sublime
y de un ideal tan noble,
que Dios nos da su presente
tanto a ricos como a pobres;
con sonrisas en los labios
todo va poniendo en orden,
decretando al universo
que mi ensueño al fin se logre.