Te recuerdo constantemente,
no me odies por haberme ido así
pero si te avisaba, no iba a poder ser libre.
Te sigo amando con toda el alma,
aunque ya no te escribo poesías.
Te amo y te amaré siempre,
pero ya no eres dueña de mis versos.
Entendí por fin, que la mejor manera de seguir amándote es dejándote ser libre,
aunque mi alma se partiera en mil pedazos
y cayera en un abismo sin precedentes.
Gracias, pero ya no formas parte de mi existir
te dejo libre y espero lo seas también
amando a quién sí amas y te ama.
_Wilmarys Torrelles_