Existen dos o tres atajos
Nos venden a través de estímulos
Idiomas no inventados
Logros inmediatos
Frutos de paraísos artificiales
Olvidamos que las sombras son parte del todo
Que la ficción de la vida no se mide por llegar a su final
Olvidamos superar o vencer dificultades
Que el tiempo se necesita asimismo
Dependientes de la velocidad
Pensamos que los jardines no nos necesitan
Que los peces deberían de vivir para siempre
Que la máquina sabe más de progresar que de progreso
Y sin querer nos da miedo empezar una vez más
Y sin querer oímos voces que mienten y son estáticas
Quisiéramos saber dónde termina o empieza el círculo
Si cada vez estamos más cerca o si sencillamente nos alejamos
Para saber la causa de los cambios
Para saber si acaso existe algo que no nos afecte
Podríamos empezar por lo más fácil
Y dar un paso cada vez que se pueda
Como quien aprende a andar
Como quien aprende a conquistarse
Verdad que ahí estamos nosotros
Experimentando nuestra propia angustia
Cebando el tiempo que exige su tributo
Esperando que los días acaben o no acaben
Sabiéndonos felices, puede ser